domingo, 11 de abril de 2010

ZEUS Y TETIS


Se trata de Zeus ( Júpiter)
y Tetis.

Zeus es el más poderoso del Panteón Griego, padre de los dioses y de los hombres, es el dios de la luz del cielo y de los fenómenos atmosféricos, el rayo , el relampago y el que amontona las nubes. Es el guadian del orden social y defensor del derecho.

Zeus el Júpiter romano es el hijo de Cibeles( Rea ) y de Saturno ( Crono)y fue salvado por su madre, cuando lo llevo a Creta para que su padre no lo devorara.
Pero ¿ quién es la señorita?

¿ qué le está suplicando?

Pues es Tetis , una divinidad marina, hija de Nereo y de Doride (hija del Oceano), Tetis es antetodo la madre de Aquiles.
Tetis fue criada por Juno (Hera) con quien mantiene fuertes vinculos afectivosy como los griegos creían mucho en los oraculos; una profecia les había dicho que el hijo de Tetis sería mas poderoso que su padre y por ello los dioses se apresuraron de darle como no, como esposo a un mortal: Peleo sería el indicado.

Pero a Tetis no esta de acuerdo e intenta eludir a este pretendiente mortal metamorfoseandose, no obstante Peleo logra hacerse con ella, y de su unión nacio Aquiles a quien Tetis intentará hacer inmortal ¿ porqué no?
después de varios experimentos con su hijo, no consiguió hacerlo inmortal, y su padre le concedió la custodia al centauro Quiron. Durante la guerra de Troya, Aquiles cae muerto y Tetis llora en compañía de la Nereidas.

En la escena de la obra vemos a Tetis que ha subido a ver al Dios del Olimpo para pedirle que ayude a su hijo en la guerra de Troya:

Esta le dice lo siguiente:
—¡Padre Zeus! Si alguna vez te fui útil entre los inmortales con palabras u obras, cúmpleme este voto: Honra a mi hijo, el héroe de más breve vida, pues el rey de hombres Agamemnón le ha ultrajado, arrebatándole la recompensa que todavía retiene. Véngale tú, próvido Zeus Olímpico, concediendo la victoria a los teucros hasta que los aqueos den satisfacción a mi hijo y le colmen de honores.

De tal suerte habló Zeus, que amontona las nubes, nada contestó, guardando silencio un buen rato. Pero Tetis, que seguía como cuando abrazó sus rodillas, le suplicó de nuevo:

—Prométemelo claramente asintiendo, o niégamelo —pues en ti no cabe el temor— para que sepa cuán despreciada soy entre todas las deidades.
Zeus, que amontona las nubes, respondió afligidísimo:— ¡Funestas acciones! Pues harás que me malquiste con Hera cuando me zahiera con injuriosas palabras. Sin motivo me riñe siempre ante los inmortales dioses, porque dice que en las batallas favorezco a los teucros. Pero ahora vete, no sea que Hera advierta algo; yo me cuidaré de que esto se cumpla.
Y si lo deseas, te haré con la cabeza la señal de asentimiento para que tengas confianza. Este es el signo más seguro, irrevocable y veraz para los inmortales; y no deja de efectuarse aquello a que asiento con la cabeza.
Dijo el Cronión, y bajó las negras cejas en señal de asentimiento; los divinos cabellos se agitaron en la cabeza del soberano inmortal, y a su influjo estremecióse el dilatado Olimpo.
"Después de deliberar así, se separaron [Zeus y Tetis]; ella saltó al profundo mar desde el resplandeciente Olimpo, y Zeus volvió a su palacio. Los dioses se levantaron al ver a su padre, y ninguno aguardó a que llegase, sino que todos salieron a su encuentro. Sentóse Zeus en el trono; y Hera, que, por haberlo visto no ignoraba que Tetis, la de argentados pies, hija del anciano del mar con él departiera, dirigió enseguida injuriosas palabras a Jove Cronión:
-¿Cuál de las deidades, oh doloso, ha conversado contigo? Siempre te es grato, cuando estás lejo de mi, pensar y reolver algo clandestinamente, y jamás te has dignado decirme una sola palabra de lo que acuerdas.
Respondió el padre de los hombres y los dioses. -¡Hera! ¡No esperes conocer todas mis decisiones, pues te resultará difícil aun siendo mi esposa. Lo que pueda decirse, ningún dios ni hombre lo sabrá antes que tú; pero lo que quiera resolver sin contar con los dioses no lo preguntes ni procures averiguarlo."

No hay comentarios:

Publicar un comentario